COMO SI HUBIERA ALGUNA MANERA DE QUE YO PUDIERA ESTAR SIN NECESITARTE.

sábado, 1 de diciembre de 2012

Hola Diciembre;

Ya estás aquí. De nuevo. Igual. Diferente. Raro. Conocido. De mil formas. Mil formas sin ti.
Empieza otro mes frío, gris, apagado. A juego con nosotros dos.
Empiezan los días de echarte de menos, los días en los que los recuerdos pasan rápidos y borrosos.
Ya no queda nada, los recuerdos se desvanecen.
Empiezan las ganas de comerse el mundo, tu mundo.
El frío nos encendió una vez, ahora es el culpable de que esto se apague. De haber hecho cenizas la llama que nunca empezó.
Sería capaz de preguntarte si me echas de menos, o si acaso alguna vez todo lo que apenas ya recuerdo pasó.
Esos recuerdos borrosos que cuando menos quiero más aparecen, el olor a chimenea en mi pelo, el anhelo por tu aliento, tu nariz fría rozando tímidamente mi rostro, nuestras sonrisas cómplices.
Todo esos recuerdos fueron frutos del frío. De Diciembre. De mis ganas de ti. De tus te quiero fingidos.
Supongo que ahora ya sé lo que se siente al ver que por fin logras superar algo que no tiene sentido.
Eso de que el tiempo lo cura todo, de que algún día sería capaz de recordar sin que duela.
Ahora lo sé.
Y ahora sonrío sin fingir, sin que el dolor se apodere de mí por dentro.

http://www.youtube.com/watch?v=DXkTR1bCy5w

Yo le quise, y a veces el también me quiso.







No hay comentarios:

Publicar un comentario